1
Acudir a un especialista es lo mejor
No ponga en manos inexpertas la salud y bienestar de sus hijos. Existen muchas opciones pero asegúrese que está con un profesional capacitado, debidamente acreditado y certificado por una institución seria.
2
Ser constante...
Enfóquese en la constancia del tratamiento de sus hijos, concéntrese en los resultados finales que el especialista ofrece y asegúrese que el tratamiento no se suspenda.
3
Participe del éxito del tratamiento
Como padres de familia, debemos de compartir la responsabilidad del cuidado y bienestar de nuestros hijos y estar muy al pendiente del correcto uso y la disciplina que el tratamiento requiere para que sea exitoso.
4
Recomiende a sus amigos y familiares un servicio profesional y exitoso...
